¡Buenos días! Un escalofrío me ha recorrido al escribir superar la vuelta al cole. Pensar en marcharnos del pueblo, guardar las bicis y volver a la rutina me entristece. Me da pena que se acaben las vacaciones y el verano, aunque paradójicamente, septiembre es uno de mis meses favoritos. Me encanta la sensación de comenzar algo nuevo, de tener un nuevo curso por delante con planes y proyectos. Reconozco que disfruto mucho con los niños en casa, y me da un poco de penita que se les acabe lo bueno, y este año más que ninguno tengo muchos sentimientos encontrados con la incorporación de Bruno al cole.
Este año me he relajado con el tema de los propósitos, y mira que me gusta, porque tengo un escenario nuevo. Cuando deje a los niños, tres horas y media por la mañana serán mías y sólo mías. Para trabajar, para crear, para hacer lo que más me gusta. Para encontrarme después de cinco años sin ir al baño sola. Estoy hasta nerviosa. Así que se me ha ocurrido compartir contigo algunas ideas que pienso poner en práctica para superar la vuelta al cole, hacernos la vida más fácil y disfrutar de septiembre y del nuevo curso. ¿Quieres saber cuales son?
- Hacer una foto el primer día de cole. Busca un escenario luminoso en casa o fuera, y pídeles su mejor sonrisa. Me encanta ver el cambio de Berta estos años, la veo tan pequeñita el primer día de cole… Este año vamos a usar una pizarra para poner la fecha, su nombre, cuanto mide y lo que más le gusta, para poder compararla al final del curso (en Pinterest tienes muchos ejemplos, quedan unas fotos súper chulas).
- Todo en orden. Hasta ahora, Bruno se quedaba algunas mañanas en casa durmiendo mientras llevaba a Berta al cole, y cuando bajaba, lo hacía casi en pijama y sin desayunar. Ahora tenemos el reto de llegar los tres al cole vestidos, peinados y desayunados (o al menos ellos). Bruno ya se viste solo y eso ayuda, pero para mi es fundamental dejármelo todo listo la noche anterior, para no perder el tiempo. Estos días me toca marcar toda la ropa con las etiquetas termoadhesivas de Petit Fernand, que ellos han personalizado. Así, aunque Bruno no sabe leer, identifica rápidamente qué es lo suyo.
- Levantarse antes (y jugar). En casa nos cuesta madrugar, a todos. Pero las épocas en las que a Berta le cuesta un poco más ir al cole, la levanto antes. Para no ir con prisas y empezar el día con malos modos. A ella le encanta pintar, y aprovechamos el rato que yo preparo el desayuno para hacer un dibujo. Mano de santo.
- Jugar al aire libre. Puede que se hayan acabado las vacaciones, pero hay que aprovechar al máximo los días antes de que llegue el invierno. En Madrid, el primer mes además no tienen clase por la tarde, así que aun hay tiempo de recogerles y hacer un picnic en el parque, pasear con la bici y disfrutar de las tardes antes de que cambien la hora y el invierno se apodere de nosotros.
- Aprender juntos. Con los dos en el cole ya, las tardes son integramente para ellos. Pensar en otoño es pensar en las tardes en casa, en hacer meriendas juntos, leer y pintar. Me ha encantado la idea de Matilda’s Lit Kit, que te envían cada mes una caja con libros y material para hacer manualidades en inglés, y así tener material para jugar y aprender juntos otro idioma.
- Ser turista en tu ciudad. Un planazo que me contaba una amiga y no puedo esperar a llegar a Madrid para hacerlo. Recoger un plano en la oficina de Turismo, y hacer que los niños elijan el destino y la ruta, marcándola con un boli. Podemos parar a merendar y descubir con otros ojos la belleza de lo que tenemos cerca.
- Tener siempre flores. Pocas cosas me suben tanto el ánimo como tener flores en la entrada, y al parecer tenerlas cerca del lugar de trabajo aumenta la creatividad. Este año voy a probar una suscripción a Colvin, la empresa que ha revolucionado la venta online de flores. Ellos se encargan de enviarte a casa un ramo con la frecuencia que tu elijas, sin gastos de envío. Los Colvin van cambiando según las flores de temporada, y son siempre flores que duran y duran.
- Revisar los propósitos para el nuevo curso. Es genial tener objetivos, ya sabéis que yo soy de listas, de escribir y de pensar en mejorar. Pero muchas veces solo nos proponemos cosas que nos cuesta mucho cumplir, en vez de cosas que realmente nos gustan. En lugar de proponerte ir al gimnasio tres veces a la semana, proponte dar un gran paseo siempre que puedas. Aprender a usar la cámara de fotos, apuntarte a baile o ver más a las amigas son propósitos que verdaderamente merecen la pena…
- Planear una escapada. Si eres adicta a las vacaciones, tener la vista puesta en una salida en septiembre puede ayudarte a sobrellevar la rutina. Yo quiero escaparme al norte en algún momento antes de Navidad, y ya estoy empezando a pensar en el viaje. Soy de las que disfrutan tanto organizando las vacaciones como viviéndolas…
- Con música todo es mejor, y seguro que hay canciones que te transportan directa a la playa o al pueblo. Elegir la banda sonora del verano con ellos os permitirá volver a revivir ese verano durante todo el año. La nuestra, este verano, es sin duda Adele, los niños se han aficionado a cantar a dúo sus canciones sin entender una palabra de lo que dicen. ¿Cuál es la vuestra? ¡Feliz rentrée!
Buenisimas ideas para comenzar el curso! Actividades llenas de energía positiva para un mes lleno de contrastes.
Muchas gracias Elena!!! Espero que pongas alguna idea en marcha! Gracias por comentar!